jueves, 12 de febrero de 2009

El Ente: terror clásico

El otro día estuve viendo El Ente, en el canal Dark. La película trata de una madre soltera (Barbar Hershey) perseguida y violada por un ser demoniaco, por lo que acude a la ayuda de un psiquiatra (Ron Silver), pero él cree que todo está en su cabeza... Y lo mejor de todo (y más escalofriante) es que está basada en hechos reales. Dicho así parece más bien un telefilm de sobremesa, o una historia de Iker Jímenez, pero lo cierto es que a mí me sorprendió, y me pareció una pequeña joya de película, quizá demasiado desconocida. Esta película de 1981 cuenta entre otras cosas con unos efectos especiales excelentes para la época, aunque también para la nuestra, ya que están muy por encima de algunas cutre películas de hoy en día con unos efectos especiales que parecen sacados de los primeros videojuegos en 3D que se hicieron. Afortunadamente no es el caso de El Ente, que además de sus efectos especiales más que buenos, es lo que se podría llamar, terror del clásico. Nada de las típicas películas de sustos o el cine de terror adolescente, que el 99% de las veces es lo peor. Es terror puro del estilo del Exorcista por poner un ejemplo. Aunque también en parte es terror psicológico, ya que al no ser nada tangible ni visible lo que le pasa a la protagonista, los psicólogos que visita creen que es producto de su imaginación y que alucina.
Viendo la película te llegas a creer lo que le está pasando y sufres por lo mismo. Inolvidables las escenas en que el ente la viola, con ese "Boom Boom" incansable de fondo, que lo hace todavía más escalofriante, o esos dedos invisibles tocándole los pechos, con un enorme realismo. Por no hablar del final tan inquietante (que no voy a contar, por si acaso), aunque quizá esté algo exagerado con respecto a lo que ocurrió de verdad, pero eso no deja de hacer que la película sea estremecedora.
Después de ver la película, una no se atreve a afirmar que eso fuera cierto, pero tampoco a negar que lo fuera. Con este tipo de cosas hay que ser cuidadoso, y al igual que no se debería creer todo a rajatabla (la propia película dice al final que los hechos son reales pero con algunas partes ficticias o exageradas, lógicamente para hacer la película más entretenida), tampoco se debería ser uno de esos cabezones escépticos que siempre hay y no se creen nada que tenga que ver con lo paranormal o cualquier cosa rara desconocida para el ser humano. Precisamente, si estos temas nos son tan desconocidos y tan inexplorados para casi todos, ¿por qué no abrirse aunque sólo sea un poco y a pesar de nuestros temores a algo que podría ser cierto?

Una película muy recomendable tanto para quien le gusten estos temas como para quien sea amante del cine de terror. Un 7’5

1 comentario:

Dario Chano dijo...

vamos a seguir la recomendacion.

saludos