jueves, 9 de julio de 2009

Tortura: ni arte ni cultura

Es la frase que mejor define a esa barbarie comúnmente llamada "El arte del toreo". Si consideramos "arte" a maltratar a un animal o persona para luego asesinarlo cruelmente, pues entonces sí, el toreo es arte, aunque quien diga eso se está revelando a sí mismo como un sádico y un sediento de muerte, sangre, dolor y sufrimiento, lo que yo llamaría un Josef Mengele de los toros.

Tras estas palabras no hace falta decir que soy antitaurina. No de los que van a manifestaciones y esas cosas, básicamente porque nunca he ido a una, al menos no todavía. Sin embargo, comparto la misma repulsión que ellos hacia el toreo. Cuando veo en la tele una corrida de toros, una noticia de maltrato o abandono animal o cualquier otro tipo de tortura, siento exactamente la misma sensación en todos: una sensación de asco, repulsión y odio, algo que no me gustaría haber tenido que sentir nunca y sin embargo ahí están las corridas de toros, alegrándome cada vez que el toro le cornea al payaso del torero, mientras deseo que siga enzarzado en su defensa y no le suelte hasta clavarle bien el cuerno. Y encima le llaman asesino al toro, al animal que se está defendiendo desesperadamente de una muerte segura a manos de unos crueles y sádicos verdugos vestidos de payaso.

Quiero expresar lo que pienso de esto, así que voy a proponer una visión real del toreo desde dos puntos de vista: el primero digamos que será más global y el segundo se centrará en lo que es el toreo en sí.

1º punto de vista:

Puesto que el mundo es muy grande y hay muchos millones de personas, supongamos que mientras un torero sale a la plaza a practicar su "arte", en ese mismo momento es muy probable que, dispersos en otras partes del mundo, haya un médico, un veterinario, un bombero, un biólogo conservacionista y un miembro de una ONG, trabajando en lo suyo, que en estos casos es curar a un animal o persona, salvar vidas, conservar especies.... Pues bien, supongamos que todos ellos, incluído el torero, terminan con éxito su trabajo. Mientras el médico, el veterinario, el bombero, el biólogo conservacionista y el miembro de la ONG (algunos incluso jugándose la vida) han aportado su granito de arena a un acto de bondad con humildad y están contentos por ello, recibiendo únicamente el sueldo que se han ganado (algunos de ellos probablemente ni eso), el torero, que por supuesto está muchísimo más orgulloso y contento de asesinar a un animal tras haberlo TORTURADO en público, es ovacionado, aplaudido, homenajeado y sacado en brazos por la puerta grande, mientras recibe halagos y es calificado de héroe y artista, saliendo por la tele para que todos se enteren de su "hazaña", y encima... SE FORRA!!!!

Ésta es la cruda realidad de una España cínica e hipócrita, que considera inmoral el maltrato a perros, gatos... etc y pone el grito en el cielo ante el abandono de los mismos mientras observa con frialdad y sin corazón la tortura (ojo! legalizada!!) a un toro, un animal que sufre tanto como perros y gatos y que tiene el mismo derecho a una vida sin tortura. ¿Por qué cruel motivo el toro se puede maltratar y todos lo ven normal, mientras despotrican contra el que maltrata a un perro?. Que yo sepa, toro y perro tienen un corazón, los dos son mamíferos, y los dos son seres vivos al igual que las personas y por lo tanto SUFREN IGUAL ante la tortura. Decir que un animal se puede maltratar y otro no, pues me parece de un cinismo y de un retraso repulsivos, la verdad. Esto es como decir que a las personas de raza blanca no se las puede maltratar y a las de otra raza cualquiera sí se puede y hasta está legalizado... Simplemente repulsivo.

"Y de repente el toro miró hacia mí. Con la inocencia de todos los animales reflejada en los ojos, pero también con una imploración. Era la querella contra la injusticia inexplicable, la súplica frente a la innecesaria crueldad". Antonio Gala


2º punto de vista: (las siguientes descripciones pueden herir la sensibilidad)


¿Qué son en realidad las corridas de toros?

Son el espectáculo público de la tortura sangrienta, cruel y prolongada de un mamífero superior capaz (como nosotros) de sentir dolor, cubierta de forma penosa con las payasadas del torero que se cree "valiente". La corrida no es más que una técnica de tortura, comparable a las que se emplean con los humanos, capaz de transformar a una persona entera en una piltrafa a la que se puede manejar como se quiera.

Se cree que el toro ataca pero lo que hace es DEFENDERSE DESESPERADAMENTE

24 Horas antes de entrar en la arena, el toro ha sido sometido a un encierro a oscuras para que al soltarlo, la luz y los gritos de los espectadores lo aterren y trate de huir saltando las barreras, lo que produce la imagen en el publico de que el toro es feroz, pero la condición natural del toro es huir NO atacar.

Le colgaron sacos de arena en el cuello durante horas. Lo golpearon en los testiculos y los riñones. Le indujeron diarrea al poner sulfatos en el agua que bebió. Todo esto es con el fin de que llegue débil al ruedo y en completo desorden. Se le ha untado grasa en los ojos para dificultar su visión y en las patas se le puso una sustancia que le produce ardor y le impide mantenerse quieto, así el torero no desluce su actuación.

Los Caballos también sufren:

Para los Picadores se eligen a caballos que ya no tienen valor comercial, por que el animal muere en 3 o 4 corridas a lo mucho, es muy habitual que el animal sufra quebraduras múltiples de costillas o destripamientos. Puesto que el instinto del caballo es huir del toro, se les tapan los ojos, les ponen periódicos en los oídos y hasta les pueden cortar las cuerdas vocales para que no se oigan los gemidos. Se les coloca un peto simulando que se les protege, pero en realidad se trata de que el publico no vea las heridas al caballo que pueden presentar exposición de vísceras.

El Trabajo Del Picador:

Si el torero percibe que el toro embiste con mucha energía, ordena al picador hacer su trabajo: Consistente en desangrar al toro para debilitarlo, clavándole en el lomo una lanza que destroza músculos (trapecio, romboideo, espinoso y semiespinoso, serratos y transversos de cuello) Lesiona, además, vasos sanguíneos y nervios. Esto es para que el torero pueda brindar la expresión artística que se supone debe tener este espectáculo. Por tanto, su objetivo es desangrar parcialmente al toro, reducir considerablemente su fuerza, obligarle a humillar la cabeza y permitir al matador simular su valentí­a. Un solo puyazo podría destrozar al toro, por eso se hace en tres tiempos "para mayor goce de la afición."
 
Las Banderillas:

Las banderillas aseguran que la hemorragia siga; se intenta colocarlas justo en el mismo sitio ya dañado con los ganchos de metal. El gancho se mueve dentro de la herida con cada movimiento del toro y con el roce de la muleta, el peso de las banderillas tiene precisamente esa función.

Algunas banderillas tienen un arpón de 8 cms, y se les llama "de castigo", a las cuales es sometido el toro cuando ha logrado evadir la lanza del picador. Las banderillas prolongan el desgarre y ahondamiento de las heridas internas. No hay límite al número de banderillazos: tantos como sean necesarios para desgarrar los tejidos y piel del toro.

Demostrando "Valor":

La pérdida de sangre y las heridas en la espina dorsal impiden que el toro levante la cabeza de manera normal, y es cuando el torero puede acercarse. Con el toro ya cerca del agotamiento, el torero no se preocupa ya del peligro y se puede dar el lujo de retirarse del toro después de un pase especialmente "artístico", echando fuera el pecho y pavoneándose al recibir los aplausos del público. Cuando el toro alcanza este estado lastimero, el matador entra en el ruedo en una celebración de bravura y machismo, a enfrentarse a un toro exhausto, moribundo y confundido.

La Espada:

El toro es atravesado con una ESPADA de 80 cms de longitud, que puede destrozarle el hígado, los pulmones, la pleura, etc., según el lugar por donde penetre en el cuerpo del animal; de hecho, cuando destroza la gran arteria, el toro agoniza con enormes vómitos de sangre. A la hora de matar, si el toro corre con un poco de suerte muere de una estocada, pero no como se piensa de una estocada al corazón si no que la espada penetra pulmones y diafragma, a veces una arteria mayor, y de ahí la hemorragia que se aprecia del hocico y de la boca. A veces mueren ahogados en su propia sangre.

La tortura sigue:

el toro, en un intento desesperado por sobrevivir, se resiste a caer, y suele encaminarse penosamente hacia la puerta por la que lo hicieron entrar, buscando una salida a tanto maltrato y dolor. Pero entonces lo apuñalan en la nuca con el DESCABELLO, otra larga espada que termina en una cuchilla de 10 cm. A pesar de estos terribles tormentos, el animal no suele morir de inmediato por su gran fuerza, pero finalmente cae al suelo, porque la espada ha ido destrozando sus órganos internos.

Asesinos cobardes:

la tortura sigue, lo rematan con la PUNTILLA de 10 cm. con lo que intentan seccionarle la médula espinal, a la altura de las vértebras atlas y axis. El toro queda así paralizado, sin poder siquiera realizar movimientos con los músculos respiratorios, por lo que muere por asfixia, muchas veces ahogado en su propia sangre, que le sale a borbotones por la boca y la nariz.

El arrastre:

después que le destrozan las vértebras, el toro pierde control sobre su cuerpo desde el cuello hacia abajo, sin embargo hacia arriba se mantiene intacto, por lo que esta conciente de todo el horror y de cómo es arrastrado fuera del ruedo.

"Resulta bochornoso e irritante para alguien con un mínimo de sensibilidad moral que a la matanza de toros no sólo se le elogie, como algo bellísimo, artístico, y demás, sino que se le llame en España «la fiesta nacional»". Esperanza Guisán


Algunas de las frases más frecuentes típicas de los ceporros para justificar (penosamente) lo injustificable:

"El toreo es una tradición de España desde hace siglos y no se puede prohibir."

Pues por esa regla de tres, en pleno siglo XXI seguiríamos acudiendo a esas atrocidades que eran las peleas de gladiadores, seguiríamos quemando a "supuestas brujas" o mandando a la gente a la horca porque nos parece que han dicho algo sospechoso, habría explotación infantil y por supuesto, la esclavitud estaría totalmente legalizada. Afortunadamente hay una cosa que se llama EVOLUCIÓN, gracias a la cual esas "tradiciones" no están permitidas hoy en día. Está claro que las tradiciones inmorales y crueles hay que abolirlas, pero claro, en pleno siglo XXI en la España civilizada, todavía hay mentes atrasadas, que si por ellas fuera, seguiríamos yendo en taparrabos, haciendo sonidos guturales y viviendo en cavernas.

"Bah!! si los toros tienen la piel muy gruesa y esos pinchacitos de nada no les hacen daño."

MENTIRA. Si al toro se le para una mosca en la piel, éste la espanta con el rabo ¿qué sentirá entonces cuando le claven las banderillas de 8 cm? Por no hablar del contínuo tormento que sufren mientras se mueven con las banderillas clavadas, que van profundizando en la herida.
Es más, en un programa de veterinarios, yo misma oí en palabras de un veterinario que tenía que curar un tumor externo a un toro, que "los toros tienen la piel muy sensible". Lo más fuerte y que me dejó congelada fue cuando, tras extrirparle el tumor que le hacía un bulto al toro en uno de los costados, el comentarista del programa dice "y ahora el toro ya está listo para ir a la plaza" o_O Se ve que los cacho cafres querían quitarle el bulto para luego torturarlo y matarlo, porque claro "el bulto hace muy feo en la estética del toro", y eso repito, después de haber estado diciendo el veterinario que los toros tienen la piel sensible. Vamos, yo soy veterinaria y, me vais a perdonar la expresión, pero los mando a la mierda si me piden curarlo para eso, así de claro.

"Hay otros problemas mucho mayores en el mundo. Los antitaurinos deberían preocuparse de cosas más importantes y no de las corridas de toros."

Ah, pues entonces, si yo me entero que el vecino de al lado es un psicópata maltratador de animales o personas, que abusa de niños y asesina personas... no tengo que quejarme ni denunciarlo ¿no? porque claro, como hay otros problemas mayores en el mundo como el hambre, las guerras y la desigualdad, en comparación ese sólo es un "problema menor".... Que haya otros problemas más importantes no quiere decir que haya que ignorar los "menores" si así se quiere llamar, por no hablar de que cada uno tiene la libertad de defender la causa que prefiera. Es más, es muy posible que el maltrato animal sea la raíz de la violencia y la insensibilidad humana. Si no arrancamos los problemas de raíz, o, dicho de otra forma, si no somos capaces de respetar y sentir compasión por los animales, los seres vivos más inocentes ¿cómo vamos a respetarnos los unos a los otros?

"El toro ha vivido muy bien durante su vida y ha sido muy bien cuidado para llevarlo a las corridas cuando le toque. El ganado normal se trata peor."

Ningún ser vivo ha nacido para ser maltratado por otro. Sí, en la Naturaleza existe la violencia, los carnívoros se comen a los herbívoros y los herbívoros a las plantas. Es algo inevitable. Sin embargo, esto no justifica la violencia y crueldad gratuitas tan frecuente en nuestra "civilizada" sociedad. Soy perfectamente consciente de lo mal que se puede llegar a tratar al ganado que se cría como alimento, y esto por supuesto tampoco me gusta porque el humano, que precisamente es de los pocos depredadores que si quisiera, podría matar instantáneamente a su presa sin causarle sufrimiento, no aprovecha este don para nada. Pero esto sigue sin justificar la muerte cruel que se les da a los toros PÚBLICAMENTE bajo el nombre de "Arte bellísimo", ésto es lo inaceptable.

Ah, y por esa regla de tres, hagamos lo mismo con los toreros, ¿no? ya que ellos también viven muy bien y mejor que la mayoría de las personas, con la cantidad de dinero que les debe de salir hasta por las orejas. Cojamos a los toreros cuando ya no sean útiles o nos cansemos de ellos, y hala, a torturarlos sin piedad hasta la muerte porque "han vivido muy bien"....

"Sin el toreo no existirían los toros de lidia, es una forma de conservar la especie."

MENTIRA. Esto no es más que una falacia. Los toros bravos no existen porque existan las corridas, sino al revés: las corridas existen porque existían toros bravos. Es más, el toro de lidia como raza NO existe. Es un término que se han inventado para denominar a toros pertenecientes a diversas pseudorrazas que muestran una agresividad instintiva cuando son provocados o acosados. Por tanto, si las corridas desaparecen, estos toros bravos seguirían existiendo, ya que no pertenecen a ninguna raza concreta. Por otro lado, justificar la existencia de una especie para ser torturada hasta la muerte, carece de cualquier ética y es una perversión sólo concebible para una mente enferma y desquiciada, como la de alguien que disfruta viendo destrozar hasta la muerte a un animal.

Por si alguien no se lo cree, toda la información al respecto está en esta página:
http://www.animanaturalis.org/704


Tras la cruda (pero real) descripción de este "arte" de la casa de los horrores y más propio de los orcos que de los humanos, espero que alguien, quizá esos que están en el bando neutral y no son conscientes de los horrores que ocurren en las plazas de toros, reflexione sobre el tema y sepa qué es lo que ocurre en realidad. No podemos permitir que esta barbarie inhumana continúe y siga legalizada, en pleno siglo XXI esto no es normal. ¿Tan difícil es hacer lo mismo pero sin dañar ni maltratar al animal? O será que son tan cobardes que tienen que hacerle daño para debilitarlo y así poder ponerse delante del toro... Sólamente hay que ponerse en la piel del animal para comprender su sufrimiento. Y eso que no he contado las auténticas barbaridades que se hacen con los toros y otros animales en las "fiestas" de los pueblos de retrasados (en los dos sentidos de la palabra).

Yo sí que amo de verdad al toro, un animal fuerte, noble y bellísimo, que en las corridas de toros es convertido en una piltrafa sangrante, agonizante y destrozada.

"La conmiseración con los animales está íntimamente unida con la bondad de carácter, de tal manera que se puede afirmar de seguro, que quien es cruel con los animales no puede ser buena persona". Schopenhauer.

4 comentarios:

Rain Dog dijo...

Pues ahora encima tenemos a un "toro asesino". Vamos a peor, está clarísimo.

PS: Enhorabuena por el blog. Hoy lo he visitado por primera vez, y no será la última. Un saludo.

Luthien Palantir dijo...

Es muy triste leer cosas como la del enlace que pones (y saber que existen blogs tan patéticos)... y el caso es que no me sorprende para nada, en cuanto oí en la tele lo del muerto en los sanfermines pensé, "hala, ahora le empezarán a llamar asesino al toro y a decir lo malo malísimo que es y blablabla..." Los muy ceporros no son capaces de comprender que si a ese toro y a todos los demás los hubiesen dejado tranquilos en el campo donde deberían estar, no pasarían estas cosas. Pero como en tantas cosas, pagan justos por pecadores... en fin, de pena.

Gracias por tu comentario y un saludo ;)

Kinezoe dijo...

Felicidades por tu artículo; consigue remover conciencias. Yo lo tenía y lo sigo teniendo claro: no me gusta para nada el espectáculo taurino, pero me da la impresión de que vamos a tener "fiesta" para rato. El empresario taurino tiene mucho poder en este país, demasiado. Y es muchísimo el dinero que mueve este negocio.

El mantener determinadas tradiciones supone un atraso y falta de conciencia terribles. El sentido común y la humanidad brillan por su ausencia. Muy triste que hayamos avanzado tan poco en ciertas cosas...

Un abrazo!

Luthien Palantir dijo...

Gracias por el comentario, Kinezoe. Y sí, desgraciadamente yo también creo que van a tener que pasar muchos años hasta que se le ponga fin a esta barbaridad. Y lo que comentas del dinero es muy cierto, debe de ser eso lo que nubla las mentes y hace desaparecer cualquier rastro de sensibilidad, o eso, o simplemente son mentes desquiciadas desde el principio. Es tan lamentable como cierto.

Un abrazo ;)